Los avances en nuevos materiales y técnicas, nos permiten hoy en día elegir los acabados de nuestras ventanas de forma que mejor se integren con el resto de la decoración, o incluso como elemento definitorio de la misma.
Las ventanas cobran mayor importancia dentro del diseño de las estancias, aportando nuevas formas, texturas y colores que personalizan aún más los ambientes. Técnicas como el acabado bicolor posibilitan mantener la estética uniforme en el lado de la fachada con acabados diferentes en el lado del interior.
Gracias a los diferentes acabados, podemos personalizar el aspecto final de una ventana en cuanto a su Textura, Color y Brillo. Estos acabados admiten un mayor o menor grado de personalización en función del material sobre el que se realizan.
El aluminio es el que más posibilidades de decoración diferente proporciona.
- Toda la carta de acabados RAL (Colores / lacados).
- Efectos metálicos (plata, oro, bronce,…/ anodizados).
- Imitación a la madera (decoración sublimación, decoración foliada, …).
- Con todo tipo de acabados brillo, mate, texturado…
La madera, cuenta con un acabado natural que admite cualquier tipo de color y diferentes texturas de manera sencilla.
En PVC existen diferentes posibilidades.
- Algunos colores de la carta RAL, decoración foliada.
- Tonos mates sin efecto metálico.
- Imitación madera, decoración foliada.
Es evidente, el efecto decorativo del acabado de una ventana. Lo que debemos saber además, es que el acabado de las ventanas también proporciona un tratamiento en la superficie de los perfiles (o marcos), que mejora sus características superficiales.
Algunos de los acabados que proporcionan protección a tu ventana son:
- Anodizado: solo se aplica en aluminio. Deposita una capa uniforme en la ventana que la protege contra la corrosión y agentes externos extremos (por ejemplo salinidad en entornos marítimos).
- Barnices: En el caso de la madera, el acabado superficial con barnices especiales, mejora el envejecimiento de las ventanas y las protege de agentes externos y plagas.
Es necesario tener en cuenta que el acabado supone una barrera de protección contra el exterior para nuestra ventana, y cada tipo de acabado tiene unas garantías diferentes frente al envejecimiento y la conservación del aspecto de la ventana.
Si los acabados envejecen rápidamente, a pesar de que las ventanas mantengan la funcionalidad intacta, tendremos la sensación de que necesitamos cambiarlas por viejas.